Marte
¡Elige tu propia aventura!. Escuché en el baño, que un empleado le decía a otro, que La noche estrellada de Vincent van Gogh, colgado en el museo, no es el cuadro original, y estaría junto al otro cuadro de la silla, en el cofre fort de un millonario chino, pero en Taiwán. La vida es eso que pasa entre un viaje a Marte y otro. ¿Amartizar pasará de moda o llegó para quedarse como las crocs?
En las pantallas gigantes del salón principal se muestra la cuenta regresiva del asunto, esto genera más inquietud y por lo tanto se venden más refrescos, mucho más de los vasos extra grandes Y chupan como bebés toda la noche, mirando la pantalla completamente en negro con un puntito blanco que se mueve a paso de tortuga. A veces se entrecorta para darle cierto ritmo.
De todas maneras, el de hoy es una grabación del aterrizaje de la semana pasada, son todos iguales: los conteos, los auriculares y las voces moduladas en inglés, que nadie entiende hasta que llegan los aplausos finales del equipo azul de la Nasa. Nosotros también aplaudimos excitados desde nuestros mostradores, la sugestión es importante en este negocio.

Comentarios

Entradas más populares de este blog