Crocante

Parado en el mostrador de venta directa al público y la crisis práctica de la existencia diaria: quitar las manchas de kétchup de una camisa, cómo relajarse con extraños, no tener tiempo ni para mirar el feed del celular, una lista interminable de etcétera de etcéteras.
Hay gente que piensa que un desayuno es simplemente un desayuno, cuando en realidad muchos estuvieron toda la noche pasando por la trituradora algunas cositas para que la magia sea posible. Lo que sucede en el búnker se queda en el búnker, pero les puedo asegurar que el lomito del menú poco tiene de lomito.
El agua para el café es muy importante. Con las instalaciones sanitarias de la sucursal y todo el conjunto de tuberías en problemas, no queda otra que ir hasta los baños de la estación de servicio de la esquina y cargar el agua en bidones de seis litros, siempre hay un empleado al borde del despido para dicha tarea. Ponen caras largas, pero van y vienen sin chistar.
Lo cierto es que nadie parece quejarse del desayuno, puede ser porque vienen semidormidos, porque ya han perdido toda capacidad del gusto o simplemente porque internet es gratis y eso lo justifica todo. 

¡Gracias por visitarnos y hacer su primera compra! ¡Que tengas un gran día!