Caja de perros

¡Sorpresa! un nuevo quiosco dentro de la sucursal: venta de perritos, fuente de ingresos extra para algunos. Se dice el pecado, pero no el pecador. Por ahora. Yo también pago alquiler.
Una serendipia es un descubrimiento o un hallazgo afortunado, valioso e inesperado que se produce de manera accidental, casual, o cuando se está buscando una cosa distinta. RAE.
Allí están, pequeños y peludos como ratas en una caja de cartón de termofón, en el almacén, detrás de la estantería de los saborizantes. Hay saborizantes para todo, es un mundo más complejo de lo que pensaba. You live you learn, como cantaba la peluda de Alanis Morissette.
Algunos empleados dormitan en el almacén masticando chicles y otros se ponen a dibujar porque piensan que de esa manera están haciendo algo bueno en sus vidas. Yo como no tengo vida social pierdo el tiempo en cosas inútiles, y en un portal de curiosidades me enteré de que otro que dibujaba de madrugada en una morgue, muy parecida a esta, era Leonardo Da Vinci, bocetaba de todo, cadáveres de criminales, músculos, tendones y hasta fetos. Entrometido.
Cada tanto hay algún operario revolucionario leyendo a Evgeny Morozov. Pero acá no habrá primavera árabe, por la sencilla razón que gracias a la guerra nuclear ya no tenemos ni primavera ni árabes.