Ganar la pulseada

Al principio se pierden un poco bajo tierra. Llegan peinados por la madre, me dan ternura.
Hace un par de años la primera excusa de los novatos era la fibromialgia. Intentaban, sin éxito, darle clases del trastorno músculoesquelético al señor jefe para evitar trabajar los feriados.
Caprichos caprichosamente, todos, absolutamente todos, lo primero que piden es una banderola. Es difícil abrirse el camino con esas afirmaciones delante de la tropa, cuidado de no caer en la zanja. Los codazos están a la orden del día, y hasta palas para enterrar hay acá.
Alguien debería decirle que en este underground no hay rey.
En todo caso puede subir a la superficie y preguntar en la administración por la semidiosa del caos: la gerenta.
Hablando de costume play, recuerdo cuando festejamos Halloween y ella se disfrazó de diabla roja, pero con orejas de Minnie Mouse ¿Por qué lo hizo? ¿A quién quería seducir?
Una tarde fui galardonado para llevar, luego del horario laboral por supuesto, una caja enorme al domicilio de la gerenta. Ingresando por la puerta de servicio directo a su alcoba.
Enorme habitación en tonos pastel. Fue muy shockeante ver que al costado de la cama tiene un caminador Proform 505 CST - Hand Grip. Tengo pesadillas recurrentes sobre esto.